
Que es lo clarificador: que ha declaraciones grandilocuentes no le sucedan hechos, prácticas o decisiones en las cuales las palabras se sostengan, no puede haber cambios en educación cuando nuestros pequeños tienen hambre, no puede haber cambios cuando no hay más inversión como quedó de manifiesto en el presupuesto provincial…
Pero estas prácticas (a las cuales podríamos llamar politiquerías) parecen ser un deporte común entre nuestros gobernantes, manifestaciones mediáticas, palabra pública, cámara y flashes, y la realidad, lejos de estar en mi escuela, está en el obturador… Y dicho sea de paso obturar es cerrar y ahí quedan flotando las pseudorealidades, en lo mediático... y mientras en palabras nuestro gobernador declara que su …presencia en estas reuniones operativas implica mi total compromiso e involucramiento cotidiano con la educación”, yo sigo enfrentando el aula en condiciones cada vez más adversas… Porque yo y cada uno de los docentes le ponemos el cuerpo al hecho educativo y no la palabra…