Un centenar de peces fueron hallados sin vida en el arroyo Gená, en cercanías a la localidad entrerriana de Santa Anita y de acuerdo a lo manifestado por autoridades municipales, las fumigaciones aéreas habrían ocasionado la mortandad. Además, los ve ecinos denunciaron que un avión fumigador sobrevoló los barrios Pueblo Nuevo y Tolcachier, incluso sobre la Escuela Nº 47 “Maestro Isaías Torres”. LEER
El mismo espectáculo desgarrador y alarmante sucedió hoy también en otra localidad, Alijilán, Catamarca, a 20 kilómetros de Ancasti: los vecinos no podían creer el espectáculo desgarrador que tenían ante sus ojos. Como si se tratara de una de las siete plagas del Antiguo Testamento, el embalse de Ipizca –que baña las costas del pequeño poblado– amaneció atestado de peces muertos. Más de 200 mil pejerreyes aparecieron flotando panza arriba o en las costas rocosas del ojo de agua azul que irrumpe en pleno corazón de la precordillera, a mil metros de altura sobre el nivel del mar. leer en Crítica
Tal vez otra causa que no deja de ser la misma causó esta tragedia, pero mientras los intereses privados avancen por sobre los intereses colectivos y nuestros gobernantes, en vez de ser el organismo de control del bien común sean quienes viabilizan las estas tropelías, mientras seamos testigos desde nuestro sofá con controles remotos y desidia tocante, mientras los dejemos … llegará el día en que el suelo que pisamos ya NO dará indicios de pisadas del hombre…
CUIDEMOS EL INTERES COMÚN DEL ATROPELLO DE INTERESES PRIVADOS